lunes, 31 de octubre de 2016

RECORDANDO A TIA CHENCHA



Ausencia Abundis Franco; La Tía Chencha
In memoriam.
Por Isaías López Abundis.

“A lo sonoro, llega la muerte como un zapato sin pie, como un traje sin hombre. Llega como un anillo sin piedras, llega a gritar sin la boca, sin lengua, sin garganta. Sin embargo, sus pasos suenan y sus vestidos suenan…callados, como un árbol!. (Gabriela Mistral

El día 27 de octubre (2009), amaneció nublado; la lluvia empezó a medio día, como presagio de la noticia que estaba por recibir: suena el celular…es mi hijo Nelson:- ¿ya supiste?, falleció Tía Chencha, en Acapulco, que su cuerpo lo traen como a media noche-. Al instante, su imagen, su recuerdo me llega a la mente.
Cuatro hijas tuvieron mis abuelos Manuel Abundis Priego y Carmen Franco Tapia: Basilisa; Angela (mi madre), Ausencia y Rosalía.
Mi tía Ausencia se casó con Constantino Evaristo Jiménez, nacido en Ometepec, de profesión Telegrafista, quien llegó a Azoyú para quedarse. Procrearon a Carlos, Raúl, Nelly y José Luis, de apellidos Evaristo Abundis. El Doctor Carlos y el Contador Raúl, tuvieron el honor y la responsabilidad de servir a mi pueblo de Azoyú, como presidentes Municipales en sendas administraciones.
MUJER INDUSTRIOSA
A mi tía Ausencia la recuerdo como una mujer fuerte, trabajadora, emprendedora, que ayudaba a la gente pobre de las comunidades del municipio. Junto con sus hermanas y otras señoritas, recibió un curso de corte y confección que impartió la tía Adelina Bautista Priego, lo que le sirvió para poner un taller de costura donde, además de enseñarle a tantas y tantas señoritas, les daba trabajo, ya que en su taller se confeccionaban uniformes escolares y prendas de vestir como; pantalones, camisas, faldas, mandiles, etcétera, y surtía de telas y ropa de vestir a comunidades de Azoyú y de otros municipios.
La tía Chencha tenía, además su tienda de abarrotes donde vendía al mayoreo y menudeo. En resumen, era una mujer dedicada al negocio y al comercio.
De joven fue hermosa, igual que mi madre y mis otras tías. Se sabe en el pueblo que mi padre Isaías López Oliva llegó a Azoyú (en el año de 1944) como maestro musical para poner por primera vez la danza de “La Conquista”, mi tía Ausencia fue la Malinche de dicha danza, lo cual causó gran admiración y expectación entre la gente del pueblo. Las dos: la tía Chencha por su belleza y la danza por su colorido, vestuario y significación.
Bueno es mencionar que tía Chencha era muy afecta a la lectura de obras literarias, revistas de moda y de entretenimiento que mandaba a comprar al puerto de Acapulco. He de confesar que fue en su casa, donde de niño, empecé a leer revistas de historietas y algunos libros; y fue ahí también, que escuché las primeras canciones que magistralmente interpretaba Julio Jaramillo, canciones que aún perduran en mi gusto personal y forman parte de los recuerdos de mi niñez.
ADIOS TIA CHENCHA
Al salir de Marquelia, el día 28 de octubre por la mañana, en la Iglesia estaba una banda musical tocando las mañanitas a SanJudas Tadeo, intercesor de las causas difíciles. Al pasar por Juchitán, igualmente, una banda de “Chile frito” tocaba en honor a San Juditas. Kilómetros adelante, se encuentra el poblado de San Isidro El Puente, donde también se preparaban para festejar al Santo Varón.
Llegando a “El Carrizo”, empezaron a desfilar los árboles de bocote, que por estas fechas, con sus blancas e inodoras flores, anuncian a “Todos Santos” ó “el “Día de muertos”. Un aire fresco y una lluvia finita, me hicieron recordar la presencia del frente frío número 8, anunciado por el Servicio Meteorológico.
Al llegar a Azoyú, me dirigí a la casa de Tía Chencha. La encontré acostadita en su ataúd; en su semblante se reflejaba la paz de quien ha cumplido a cabalidad con su misión de hija, de esposa y de madre. De quien llega satisfecha a la presencia del Señor para entregarle el alma que le fue dada…ó prestada!. Le susurré al oído-“¡hasta luego, Tía Chencha!... tus hermanas, tus hijos, sobrinos, nietos, parientes y amigos, te llevaremos por siempre en nuestras mentes y en nuestros corazones”!
¡pero, ¡no!...tu misión no está acabada, que ni es la nada el punto en que nacemos; ni el punto en que morimos es la nada. Círculo es la existencia y, mal hacemos, al querer medirla le asignamos, la cuna y el sepulcro por extremos! (Manuel Acuña)

lunes, 8 de febrero de 2016

Adios a un gran bohemio...


El día lunes 11 de octubre de 2010, falleció en la Ciudad de Acapulco el señor Mateo Aguirre López, un gran bohemio nacido en el "Bello nido" de la Costa Chica de Guerrero, poseedor de un gran carisma y talento. Precisamente hace un año, el Ayuntamiento de Ometepec organizó un programa para ofrecer un merecido reconocimiento a los grandes compositores e intérpretes de la música de esta bella región costeña. Entre los homenajeados se encontraban precisamente los hermanos Mateo y Alfredo Aguirre López, Indalecio Ramírez Rodríguez, Gabriel Ramírez Rodríguez, Juan Morales López, Manuel Sánchez Carmona, Salomón Ortiz López y Aquileo Bracamontes Dávila.

En el año de 1996 o 97, el gobierno del estado realizó una edición especial de un disco que grabaron los hermanos Vargas, de Ometepec, Los Chileneros de la Costa, dueto Blanco y Negro, Pepe Jara y Mateo Aguirre, contando con la participación de Cheto Pérez, un extraordinario requintista; además del requintista de los Yonic,cs. Todas las canciones que contiene este disco son de la inspiración de Álvaro Carrillo, el Vate de la Costa Chica. Don Mateo interpreta “No sé por qué me pongo triste”, “Allá tú” y “Tardes de Ometepec”. Sin duda hoy, la bohemia de nuestra región se encuentra de luto. Don Mateo Aguirre López: Descanse en Paz!

A propósito de bohemios

Investigando en un diccionario de la lengua castellana, encontré que la palabra bohemio, tiene la siguiente definición:

Bohemio: //Gitano//vida apurada o desordenada de algunas personas, como artistas y literatos. Persona que gusta de la vida urbana nocturna, sin apego a las convenciones sociales.

Deduzco entonces, que “La Bohemia” le podemos llamar a una reunión de bohemios o personas que comparten el gusto por el arte, la música y la literatura y, por añadidura, el vino, el café y el cigarro. Sin embargo, el bohemio no es un tomador cualquiera, es un ser sentimental, creativo, pasional a veces, que lo mismo pinta, escribe, interpreta personajes en el cine o interpreta canciones y/o compone música; un individuo que nos conmueve y nos hace sentir placer, alegría, amor, odio, depresión o tristeza, que nos hace reflexionar cuando leemos una obra literaria , cuando admiramos una buena pintura, una buena película y hasta nos dan ganas de tomar una copa cuando escuchamos una pieza musical que nos toca las fibras del corazón, o nos queda a la medida con alguna situación que estamos enfrentando en la vida.

Así en México existieron y existen, grandes artistas que han hecho las delicias de generación tras generación, y que han llenado de recuerdos nuestras mentes y que han marcado por etapas nuestras vidas. Quién no recuerda las películas de Pedro Armendáriz, de Carlos López Moctezuma, Arturo Martínez, María Félix, Dolores del Río, Sara García, Marga López, los hermanos Fernando y Andrés Soler, Pedro Infante, Jorge Negrete y otros. Salvo su mejor opinión estimado lector, actualmente no encuentro un artista de cine que nos conmueva de tal manera como lo hicieran los antes mencionados.

Dentro de la música, recuerdo a un ecuatoriano que en mi niñez yo viví pensando que era mexicano, me refiero a Julio Jaramillo. Díganme quién no se ha estremecido con la calidad interpretativa de este gran bohemio que saboreó las mieles de la gloria, de la fama y que paradójicamente murió sino en la ignominia, en una mala situación económica. Quién no recuerda también a Don Alfredo Jiménez, Agustín Lara, Pedro Vargas, Pepe Guízar, Javier Solís, Pedro Infante, los hermanos Juan y Amalia Mendoza “Los Tariácuri”, “Los Panchos” creadores del requinto, del trío y de toda una época romántica en México y el mundo. Igual José José, Armando Manzanero, Víctor Iturbe “El Pirulí”, el gran cantautor Juan Gabriel, Vicente Fernández, Martín Urieta, Marco Antonio Solís, y un gran valor dentro del bolero romántico, Carlos Cuevas... y muchos más.

En nuestros estados de Guerrero y Oaxaca, contamos con artistas y bohemios que han dado grandes aportes a la música y al arte nacional, estatal y regional, tales como: Álvaro Carrillo, Agustín Ramírez, Tadeo Arredondo, Don Vidal e Indalecio Ramírez, Joan Sebastian, Ethel Diego Méndez (compositor del tema Es mi Regalo), Roberto Belester, los hermanos Arizmendi, , José Manuel Zamacona, Tiburcio Nogueda, Pepe Ramos, y un dueto que hizo época, “Los Románticos del Sur”, así como Mateo y Alfredo Aguirre, Don Cheto Pérez, siendo éste un extraordinario requintista; el dueto “Blanco y Negro”, los hermanos Bautista de Azoyú, Chanta Vielma, Pedro Torres, don Higinio Peláez y su talentosa esposa, y tantos cancioneros más.

Entre los pintores mencionaré a Casiano García Jarquín, de Huehuetán; a mi paisano Lucas Martínez, de Azoyú, a Carlos Guerrero Suástegui. Entre los escritores que entregan el alma en cada obra mencionaré a Rubén Mora Gutiérrez de Cuauhtepec; a Juan García Jiménez, de Ometepec, así como al ingeniero Abel Baños Delgado y Adolfo Gazga Baños, de Oaxaca, además de innumerables bohemios urbanos y populares compositores como Gonzalo Gallardo. Pido disculpas a los que escapan a mi mente.
Concluyo diciendo que no todo el que toma es bohemio, ni todo bohemio necesariamente tiene que tomar; recordemos el caso de Pedro Infante, quien no tomaba alcohol y, sin embargo, qué de emociones transmitía. O el de la señora Amalia Mendoza, quien al interpretar sus canciones, lloraba de emoción. ¡Eso es tener alma de bohemio!, y esa sería su esencia: libar, pero crear, trasmitir, motivar, conmover, y compartir del arte o talento que se posea.

Por ISAÍAS López Abundis

martes, 20 de enero de 2015

"RECUERDOS"

"RECUERDOS"
De mi anecdotario:
https://www.youtube.com/watch?v=1Aav0EN7aAo
Corría el año de 1965, era yo un niño; Filemón Medina vendía telas en Marquelia, él era muy amigo de mi padre, pues ahí ahí afuerita de su puesto de ropa, los fines de semana mi papá desempeñaba (entre otros) el oficio de peluquero, y yo me ponía a ayudarle a File, a sacar cuentas, pues yo las sumaba sin escribirlas en papel. File le pidió permiso para que yo lo acompañara a vender telas en la feria de la virgen de la Candelaria, el 2 de febrero en Tututepec, Oaxaca. Era la primera vez que me despegaba del seno familiar. Salimos a fines de enero, llegamos a Pinotepa Nacional; ahí, en el centro se encontraba el mercado, donde comimos; una señora morena y gorda nos atendió, Filemón era muy conocido por esos rumbos pues vivía y se ganaba la vida andando de fiesta en fiesta, partimos después de las tres de la tarde, llegamos al Río verde donde cruzamos en lanchas, en Santa Rosa nos quedamos a pasar la noche en casa de unos amigos de File; al siguiente día tomamos el camino de terracería hacia Tututepec, cuando llegamos nos recibió un amigo que él tenía allá, nos indicó el lugar donde habríamos de armar el puesto de venta de telas y ropa, para el día primero y dos de febrero la fiesta estaba en su apogeo; el bullicio de la gente, los pregones las bandas de música, los cohetes y las danzas, me hacían olvidar un poco el cariño de mis padres y hermanos. Dormíamos en el mismo puesto, solamente se bajaban los “manteados” y hagan de cuenta que estábamos en el cuarto de un hotel. Pero ese día dos de febrero como a las doce de la noche desperté, un altoparlante se escuchaba a lo lejos, una melodía resonaba en el silencio, era una canción muy triste (para mi gusto), la letra rezaba; “a la luz de una vela de cera, me he sentado a escribir esta letra”. Fue esa la primera vez que experimenté y/o conocí el sentimiento de nostalgia, esa canción en especial, quedó marcada ó grabada en el recuerdo de mi niñez, sentí un nudo en la garganta y de mi pecho escapó un sollozo;-¿que te pasa?- me preguntó Filemón-, nada –le contesté. El se levantó y prendió una lámpara de mano, ¿te duele algo? Me volvió a preguntar, -no, sólo estoy un poco triste, le dije- duérmete, me dijo, mañana nos vamos. Nos regresamos hasta el cuatro de febrero. Hoy, buscando una canción me encontré con aquella que me hizo llorar en mi niñez y mi mente se remontó hasta aquella época tan hermosa.

viernes, 18 de julio de 2014

"EL MAESTRO TANCHO"

El pasado día 12 de Febrero de 2014, falleció el Señor Constancio Hernández Petatán.
El Maestro Tancho, nació el primero de septiembre de 1923, en Santa Cruz del Rincón, Municipio de Malinaltepec, Gro., hijo de Pedro Hernández Olguin y Rosario Petatán Santana; primogénito de 12 hermanos; a los seis años de edad, estudió solfeo y música 5 años en San Miguelito, del Municipio de Iguala, Guerrero. A los 17 años, movido por la inquietud y vocación por la docencia, se traslada a la ciudad de México para inscribirse en la Escuela Nacional de Maestros; estudios que no logró concluir debido a la carencia de apoyo y recursos económicos, a la edad de 20 años abandona la Escuela Nacional para abrazar de lleno el oficio ó carrera de músico; debido a sus habilidades y aptitudes logra el dominio de instrumentos como el sax alto, guitarra, percusiones y otros de aliento. Organiza bandas, orquestas y grupos musicales en diversas partes de nuestro estado de Guerrero, así como del estado de México, Morelos y Oaxaca, finalmente recibe la oportunidad de desempeñarse como Maestro de Música de la Misión Cultural que por esos años tantos músicos, artesanos, albañiles, carpinteros, y en otras disciplinas aquella noble Misión formara.
Finalmente, en el año de 1954, la brigada de la Misión Cultural le propone como Maestro de Música, lo cual de inmediato aceptó gustosamente; asi es como fue enviado a Azoyú Guerrero, pues en ese mismo año se fundó el Jardín de Niños “María Luisa Ocampo”, fue cofundador del mismo com la Profesora Bertina Muñoz Campechano, (Directora) y las educadoras Betita Bautista Meza, Rutila Bautista Galindo; el Maestro “Tancho” como se le conocía, fue solidario y amistoso con los niños y la gente del puebloposteriormente se integrarían Camerina Hernández y Rosalinda Bautista Miranda. Casi inmediatamente, los hermanos Melquiades y Humberto Bautista Priego lo invitan a integrarse a la orquesta del pueblo que ellos habían organizado.
En el año de 1958, asiste al Restaurant de Doña Maurilia Herrera, “Doña Huica”, donde conoce a la señora Aurora Valerio Bautista, ambos quedan flechados por Cupido y al poco tiempo contraen matrimonio; ella tenía 2 hijos, Santiago y Miguel, y el Maestro Tancho los cobija como hijos propios. De su mutua convivencia y relación como esposos dan vida a 5 hijas: Rosa, Tranquilina, Delfina, Clara y Magdalena.
Algo que es digno de mencionar, es que el Maestro Tancho, compartió sus conocimientos musicales con los niños del pueblo, niños que hoy son hombres de bien; además, fue quien le enseñó solfeo a Indalecio Ramírez Rodríguez, “El Indio de Igualapa”, compositor de gran renombre nacional e internacional.
Fue el Profesor José Luis Rodríguez Muñoz, hijo de la Maestra Bertina Muñoz Campechano, su fiel compañera de trabajo, quien dirigió unas sentidas palabras de despedida al Maestro Tancho, finalmente, niños de la población entonaron cantos infantiles en su honor, y además, quebraron piñatas, algo inusual en un sepelio; sin embargo, fue muy emotivo. Descanse en Paz el Maestro “Tancho”.
Isaías López Abundis.
Azoyú Guerrero.

chilena "Acatepec"

les comparto de ésta, mi melodía a ritmo de chilena:
http://www.youtube.com/watch?v=7pTgkOfoBjU

"Una Mujer de las que ya no hay"

“UNA MUJER DE LAS QUE YA NO HAY”
Isaías López Abundis

Doña Angela Abundis Franco, es de esas mujeres que ya no existen (salvo algunas honrosas excepciones); porque en la actualidad, las mujeres buscan la conveniencia, incluso algunas jovencitas creen que casándose resuelven su vida al tener quien las mantenga, y algunas madres aconsejan a sus hijas para que escojan al mejor partido; y ¿quién es el mejor partido? Pues aquel que tiene más dinero, que tiene carro, terrenos, ganado, etc.
Doña Angela, es Mi Madre. Es ella como una “Cucuchita” que hasta en la desgracia canta, menudita, de andar ligero; a sus 88 años, asemeja una codorniz a punto de emprender el vuelo. Una mujer de carácter y determinación y al mismo tiempo; sensible, alegre, dicharachera, declamadora y cantadora.
Nos contaba mi padre Isaías López Oliva (+), que el amor les pegó con fuerza; ella, dedicada a las labores del hogar; él, músico de cuna humilde, sólo contaba con el respaldo de Don Melquiades Bautista Priego (+), hombre acaudalado de mi pueblo de Azoyú, (con quien trabajaba). Mi abuelo Manuel Abundis Priego, que también contaba con sus tierras y ganado vacuno, no aprobaba su noviazgo por razones obvias. Sin embargo, llegó el día en que Don Melquiades y otras personas fueron a pedir la mano de mi madre para mi papá; mi abuelo Manuel no pudo negarse al “pedimento” ya que Don Melquia era su pariente y además lo respetaba mucho. Ya en la plática, mi abuelo manda a llamar a mi madre y le dice; mira hija: estos señores vienen a pedir tu mano para Isaías, y dicen que tú estás de acuerdo, yo te pregunto; ¿tú te mandaste pedir? Antes de que me contestes, te digo que ese joven es muy pobre y podrás pasar muchas carencias.
Y la joven Angelita, con ese valor y esa determinación que le caracterizan hasta la fecha (a sus ochenta y ocho años), le dice a mi abuelo: mire apá, con todo el respeto que se merece; sí, es cierto, estoy de acuerdo porque quiero a Isaías, sé que es muy pobre pero primero Dios, y con la bendición de usted y mi mamá saldremos adelante, y si él en su pobreza no pudiera comprarme vestidos nuevos, usaré los mismos volteando lo de atrás para adelante.
Se levanta mi abuelo y exclama, ¡Señores, no se hable más! Mi hija se casará con Isaías, ustedes pongan la fecha!
A cambio de ese gesto, y por amor; mi padre jamás le levantó la mano a mi mamá, y duraron 58 años de casados, siempre unidos, siempre auténticos, apegados a Dios, ricos de cariño y amor, hasta el año dos mil cinco, año en que el Creador se lo llevó a él. Y aún tenemos la fortuna de contar con su presencia, aún sumida en sus recuerdos y añoranzas del lejano ayer, riendo en ocasiones con nosotros y llorando en otras, según las vivencias del pasado que nos llegan a la memoria, y a la mesa que algún día compartimos con mi padre.

HISTORIA DEL CBTis N0. 176 de MARQUELIA, GUERRERO

FICHA DE DATOS BIOGRAFICOS
CBTIS No. 176 MARQUELIA, GRO
POR: Isaías López Abundis

Fecha de creación, 24 de octubre de 1983
Inicia actividades en las instalaciones del edificio que hoy ocupa la Presidencia de esta cabecera Municipal; por esas fechas, albergaba también a la incipiente escuela secundaria “Nicolás Bravo”, hoy identificada como Secundaria Federal “Rodrigo Torres Hernández”.

HISTORIA DE LA GESTION DE SOLICITUD DE CREACION DEL PLANTEL:

Como una respuesta a la demanda de servicios educativos de nivel medio superior, por parte de las autoridades municipales y ejidales, para impulsar el desarrollo educativo, económico y social de la región; siendo director general de la DGETI, el Ing. Juan Leonardo Sánchez Cuellar; el Lic. Alejandro Cervantes Delgado, Gobernador Constitucional del estado de Guerrero, envía como una oferta, (previa autorización de la DGETI) a través y para el municipio de Azoyú, la creación del CBTis No. 176.
Conociendo la posición geográfica, su potencial turístico y comercial, el presidente municipal, designa a Marquelia como beneficiario de esta importante institución de nivel medio superior, se entrevista con autoridades municipales y ejidales locales, junto con el Lic. Ramón Castillo Barrientos quien llegó como director asignado.
Se inician labores correspondientes al ciclo escolar 83-84 y al mismo tiempo se inician las gestiones para la consecución de un predio para la construcción del inmueble. se logra una primera donación a título gratuito, de un terreno propiedad del señor Jesús Ingelmo Sánchez, con una superficie total de 10 hectáreas, (lo que hoy es la colonia 18 de octubre), pero no fue útil para la edificación debido a lo accidentado del terreno. se logra entonces, una segunda donación por parte del ejidatario Sr. Jesús Mayo Poblete, con una superficie de una hectárea, donde finalmente se construyen los edificios que hoy están en servicio.

DIRECTORES QUE HAN ESTADO A CARGO DEL CBTIS NO. 176;

Lic, Ramón Castillo Barrientos de 1983 a 1986
Lic. Boanerges Guinto Bernáldez de 1986 a 1987
Lic. Isidro Bautista Salinas d 1987 a 1990
Lic. Luis Felipe Ortega Parra 1990
Lic. Félix Mayén mayén de 1990 a 1991
Lic. Braulio Ramírez Rubí, de 1991 1993
Profr. Rubén García Castro de 1993 a 1995
Lic. Víctor M. Hernández Rodríguez de 1995 a 1996
Lic. LucÍa Enedina Bautista Arizmendi de 1996 al 2000
Lic. Mario Guevara Lozada del 2000 a 2003
Lic. Rafael Pérez Figueroa, de 2003 a 2004
Lic. Guadalupe Carmona Soriano de 2004 a 2007
Lic. Juan Fermín Zúñiga Trujillo 2007 a 2009
Lic. David Sánchez Abundis, 2009-  agosto de 2015.

Lic. Patricia Monserrat Sánchez Rodríguez,  agosto de 2015 - agosto 2019.
a partir de la fecha antes mencionada, toma las riendas del Plantel el Ing. Fredy Peralta Carmona.

En el año de 2010 y bajo el marco de la celebración del centenario de la revolución Mexicana; la DGETI lanza la convocatoria “Ponle nombre a tu escuela” en la cual participaron alumnos y trabajadores de todos los planteles a nivel nacional, con el fin de honrar a los héroes conocidos y anónimos que contribuyeron ó participaron en aquella gesta revolucionaria, y que además fueran originarios de la Región donde estuviera ubicada cada escuela; el CBTis 176 presentó varias propuestas de entre las cuales, fue aceptada la que un servidor elaboró, centrada en la figura del General Enrique Añorve Díaz, quien en esos tiempos de lucha, por su valentía y liderazgo fue nombrado general en jefe de las fuerzas armadas en costa chica; y ya con esa categoría ensanchó su radio de acción con aliados del estado de Oaxaca, enviando sus columnas expedicionarias a las órdenes de Manuel Centurión y de Eufrasio Salinas.
Así pues, desde el año 2010 y en honor a este personaje protagonista de la revolución mexicana y oriundo de Ometepec, Gro., actualmente,, este plantel se denomina como “CBTis no. 176, Gral. Enrique Añorve Díaz”.

En esta fecha tan importante, hacemos un público reconocimiento a nuestras autoridades educativas centrales y estatales de DGETI; a las autoridades Municipales y Ejidales locales, padres de familia, a la memoria del señor Jesús Mayo Poblete y a la ciudadanía en general, por el apoyo mostrado para la creación y consolidación de esta noble institución que brinda el servicio educativo a los jóvenes Bachilleres de esta Cabecera Municipal y de otras comunidades,, incluso, de otras regiones y hasta de otros estados.
Cabe mencionar, que en justa correspondencia hacia la sociedad de Marquelia y de la Región Costa Chica, el CBTis 176, hoy brinda sus instalaciones y apoyo a la naciente Universidad Tecnológica del Mar, quien viene a brindar sus servicios educativos de nivel superior a los jóvenes egresados de Bachillerato, para que puedan consolidar una carrera universitaria de calidad, bienvenida a Marquelia y a esta hermosa Región, esta importante e inmejorable opción de progreso y desarrollo!

30 aniversario; 30 años de servicio ininterrumpido, colaborando en la formación técnica, y académica de 27 generaciones de jóvenes alumnos, que el CBTis ha albergado en sus aulas y en todos sus espacios, con el solo fin de contribuir en su superación personal y por consecuencia…, familiar y social.
¡que viva el CBTis no. 176!